La contaminación atmosférica de las ciudades, el humo saliendo de las chimeneas de las fábricas y plantas de energía, son los recordatorios visibles de la amenaza que supone los cambios para el medio ambiente, y la salud personal.
Una superficie de 1 m2 tratada con PURETi destruye el Dioxido de Nitrógeno y el Dioxido de Azufre equivalente a las emisiones de un auto circulando 1 año (10.000 km)